Cosmopolitan participa en varios programas de afiliación de marketing, lo que significa que Cosmopolitan recibe comisiones de las compras hechas a través de los links a sitios de los vendedores.

Añade estas posturas de Kamasutra a tu lista de posturas sexuales habituales e invita a tu pareja a ponerlas en práctica. ¿Os animáis?

Ay, amiga, te hemos pillado: estás buscando posturas sexuales nuevas para disfrutar en pareja, eh. Pues ya te avisamos de que estás en el lugar adecuado y que, además, las que verás a continuación son una selección de las posturas más placenteras (desde la experiencia, guiño, guiño, y están al nivel de estas posturas sexuales para un orgasmo femenino más intenso). Abrimos aquí el melón del Kamasutra, ese famoso libro originario de la India, una auténtica y legendaria 'enciclopedia del sexo' que puede dar muchas ideas. Sí, es verdad que entre sus sugerencias hay muchas fórmulas que son un poco... difíciles, por así decirlo. Pero leyendo este artículo te darás cuenta de que no importa que no las conozcas o que no te hayas lanzado con ninguna, a eso hemos venido: hemos hecho una ardua búsqueda de algunas que resulten fáciles pero, sobre todo, que proporcionen placer a ambas partes implicadas, y hemos seleccionado un total de 100. Como lo lees, una lista con 100 posturas y su correspondiente explicación, para que te animes a probarlas con tu pareja sexual (si no todas, las que más os llamen la atención, claro está, pero vía libre, menudo reto).

Todos los años procuramos dar un repaso al libro del Kamasutra y, cada vez que lo hacemos, nos fijamos en que hay posturas sexuales que en otra ocasión hemos descartado pero que, con el paso del tiempo, nos parecen muy viables. Y eso es lo que nos ha ocurrido ahora. De hecho, en nuestro afán por proponerte posturas nuevas, ya hemos seleccionado las más adecuadas para practicar en el agua, las mejores posiciones para combatir el calor, las adecuadas para sentir más su pene e incluso las posturas que más calorías queman. Pero ahora venimos cargadas con más ideas para que incluyas en tu repertorio. Ah, y no te pierdas tampoco estas posturas sexuales románticas. Aquí hay para todos los gustos.

Si ya tienes una lista de posiciones que te funcionan, o incluso si eres de las que prefiere estar siempre arriba (que lo entendemos) te animamos a añadir estas y que invites a tu pareja a ponerlas en práctica (y como consejo adicional, te invitamos a que pruebes uno de los 30 mejores lubricantes para mujeres, porque seguro que los vas a agradecer tras experimentar el placer potenciado que pueden aportar. Ten en cuenta que cuanto más des la mano a los avances en este sentido, mejor lo pasaréis).

Ah, y si lo tuyo es la innovación, no te pierdas estas 10 posiciones sexuales silenciosas que deberías conocer, son un poco más difíciles de ejecutar, pero oye, no hemos venido aquí a determinar que no seas capaz. Muchas de ellas ejercitan más músculos de los que esperas (ya me entiendes), así que no está de más que os pongáis a ello. ¡Uuuuuh! 🔥

¿Os animáis? Yo digo sí: entre tanta selección, seguro que alguna os inspira, como mínimo, ¿no? ¡A tope!

Pss: Todas las posturas sexuales del Kamasutra que verás a continuación te resultarán útiles para tener relaciones con hombres con o sin penetración, pero evidentemente, también hay algunas específicas con mujeres. Eso sí: si tu vida se desarrolla en ese segundo escenario (si tienes relaciones con mujeres, vaya), ficha aquí algunas ideas para sexo lésbico.

Sabido es por todas que esta postura permite sentir el miembro de la pareja de manera más intensa pero, si te cuesta llegar al orgasmo de igual manera, añade al momento tu vibrador favorito. Tu clímax será épico.

Practica esta postura en verano, con un ventilador que apunte a tu cara, estando encima de tu chico. Una vez arriba, mueve tus caderas como si estuvieras bailando el hula-hop.

Perfecta para verano, esta postura requiere del uso de algo frío, como un hielo cubierto de un paño limpio. Pósalo sobre el clítoris con intermitencia y experimenta (o que tu compañera lo haga) la sensación que aporta el frío. Tened a mano un vibrador o succionador para culminar con un buen orgasmo.

Alinea tu pelvis con la suya (una posición que se conoce como técnica de alineación coital, también conocida como CAT) y que tu chico, encima, se balancee hacia adelante y hacia atrás mientras empuja su pelvis hacia arriba. Mantente sincronizada con él, de modo que tu clítoris roce la base de su pene

En una superficie mullida (incluyendo lo que puede ser un gran flotador), expón tu vagina y rodea con las piernas por detrás a tu chico. Él mantendrá el ritmo y tú sentirás una penetración más profunda, genial si tiene el pene pequeño.

Tumbaos al lado y exponed vuestros clítoris. Uno será estimulado con la mano de la compañera, y el otro con el muslo. Para que esta postura sea más caliente, usad lubricante efecto calor.

Ponte de costado y deja que tu chico te penetre de lado. Él debe empujar una de sus rodillas entre tus piernas, colocando su cuerpo de manera que pueda penetrarte. Coloca una mano en tu espalda para ayudar a sostenerte.

Con una pareja masculina o femenina con arnés, disfruta exponiendo tu vagina y siendo penetrada desde atrás en esta posición (apta para yoguis). Las sensaciones son muy 'hot'.

Para esta tendrás que mantener el equilibrio, pero tu pareja te puede sujetar bien para ayudarte. Si estás en forma, disfrutarás de la penetración en esta posición.

Ponte arriba y lleva tú el ritmo como si su pene fuera un joystick. Muévete de arriba abajo y hacia los lados para incrementar sensaciones.

Probad a incluir en vuestras sesiones de sexo este vibrador. Con 3 motores, el Double Flex mima el punto G, clítoris y labios externos de forma equitativa. Gracias a la tecnología Flex de silicona, sentirás su vibraciones más intensamente.

La postura de Kamasutra 'Amazonas al revés' es una postura cómoda. Súbete encima de él de espaldas, llevando tus brazos hacia atrás para tener un punto de apoyo. Tus piernas juntas entre las suyas le proporcionarán más placer y, si tu pareja sexual es habilidosa, podrá incorporarse un poco y acariciarte el clítoris.

Dile que junte sus piernas y túmbate encima de él con las piernas también juntas. Apoya tus brazos en su costado y cómele a besos mientras te penetra lentamente. Acelera el ritmo con tu cadera ayudándote de pies y brazos. Es una postura sexual donde el contacto es casi total. ¡Disfruta de una de las posturas kamasutra más placenteras!

Esta es una de las posturas kamasutra con la que más contacto visual tendréis, por lo tanto, más intimidad. Dile que se siente en una silla y móntate encima de él rodeándole con tus piernas. Apóyate en el suelo o en los refuerzos de la silla para poder subir y bajar con facilidad. Podrás estimular muy bien el clítoris ya que su vientre y sus genitales estarán en contacto todo el tiempo contigo. Tu pareja podrá acariciarte, abrazarte y besarte con facilidad, 'yassss'.

Cruzad vuestras piernas de manera que vuestros genitales puedan tener contacto, y apoyad vuestros brazos por detrás de la cabeza. Podéis echar la pelvis hacia adelante y hacer una curva con el cuerpo hacia atrás, ¡es muy excitante!

Ahora es él quien toma el mando. Juntad las piernas para que su pene ejerza mayor presión en tu vagina y miraos a los ojos mientras hacéis el amor.

De entre todas las del repertorio, las posturas sexuales de lado no son tan populares, pero son geniales para que tu pareja te pueda acariciar el clítoris, que queda despejado. Además, podrá tocarte los pechos y jugar en tu nuca y tus orejas, 'uhmmm'.

Si queréis practicar sexo anal, relájate y túmbate boca abajo. Si no te encuentras cómoda con esta postura kamasutra, prueba a apoyarte en tus rodillas o a levantar la cadera para que pueda penetrarte con más facilidad.

Aquí te dejamos una guía hecha por una sexóloga experta en sexo anal para que puedas disfrutarlo de lo lindo.

Para esta postura sexual necesitarás una almohada para no hacerte daño en la espalda. Apoya mientras tu chico, de rodillas, te coge las piernas y pone tus tobillos en sus hombros. Él tendrá el control del ritmo, por eso, ¡relájate y disfruta!

Poneos en el borde de la cama y que él te sujete las piernas elevando tu pelvis. La penetración desde atrás resultará muy placentera.

Si tenéis una bañera en la que cabéis los dos, llénala ligeramente con agua tibia, las sensaciones serán más intensas con el roce del agua. Luego, podéis terminar dándoos una ducha.

Sube una pierna (no las abras) y expón tu vagina para ser penetrada. Si su pene o el arnés es pequeño, sentirás mejor la fricción.

Esta es la postura perfecta para usar un vibrador específico para parejas heterosexuales. Disfrutaréis de la vibración los dos y llegaréis al orgasmo con más facilidad.

Si queréis elevar la temperatura, con este masajeador eléctrico inalámbrico con 20 tipos de vibración y 8 velocidades vais a alucinar. También sirve para darte masajes en el cuello y espalda, pero ya tú sabes...

Intenta poner una pierna hacia abajo junto a la de tu chica, doblando la otra rodilla hacia arriba. Las embestidas de tu compañera te frotarán de una manera completamente nueva y puedes mover tus caderas para rozarte con su hueso púbico o conseguir un ángulo diferente. Pequeño cambio, gran diferencia.

Para este necesitarás un cojín (tranquila, aquí te dejamos el mejor cojín para tener sexo con penetración) que eleve tus caderas y, con las piernas abiertas, la sensación resultará más profunda. Ayúdate de tu mano también para rozar tu clítoris.

Acuéstate boca arriba, separando las piernas y los brazos como si fueras una X. Tu compañero, sobre ti, evitará la mayor parte del contacto excepto la ingle con la ingle. Pon la atención en la sensación de ser penetrada. La mano en el clítoris también está permitida.

Si tu pareja se pone de pie y 'entra' estando tú tumbada, puedes controlar la profundidad de la penetración, en caso de que estés en el 'mood' de "mi cuello uterino necesita un descanso". Esta postura es ideal para hacerla en cualquier parte de la casa (la cocina, el comedor...).

Hazte con tu vibrador más potente y acuéstate boca arriba con las caderas en el borde de la cama o una mesa, y que tu pareja se ponga de pie para penetrarte con el pene o con un cinturón. Enciende el vibrador y aguanta. A ver cuándo pierdes en control.

Lubrícate por dentro y por fuera y haced el misionero de siempre pero abrazados, una manera superíntima y placentera de disfrutar de esta postura.

Si tu pareja es más 'pequeña' o simplemente eres fan de la penetración extraprofunda, hay un truco superfácil de probar en la posición estándar del misionero. Coloca una almohada (pero que sea muy firme) debajo del trasero para levantar tus caderas. Flexiona las piernas y ábrelas, dejando un hueco para que con tu mano puedas frotar tu clítoris.

Si tu pareja es una mujer, esta postura con un vibrador grande que os estimule a las dos es genial. Usad lubricante y que la maquinita haga su magia.

No deja de ser un clásico, pero si la ejecutas en verano, asegúrate de tener un ventilador apuntando a tu rostro, por detrás de tu pareja. El cruce de sensaciones será muy intenso.

No hay nada como mirarse a un espejo durante el acto (si no lo has probado, dale). En esta postura resultará todo tan excitante como impredecible. ¿A quién vas a mirar?

Aquí solo recibe placer la persona de arriba. Pese a que a la de abajo se le quedan las manos libres y puede darse placer a sí misma si lo desea.

Para la persona que está sobre los cojines que se necesitan, será una de las posturas más cómodas. Deja que tu pareja lleve el ritmo y tú simplemente disfruta, es tu momento.

Se llama así porque lo puede hacer cualquier pareja. Si es con arnés, será más divertido y excitante si usáis uno con vibrador incluido.

Si recibes, ponte tu vídeo 'hot' preferido y una puntualización: has de estar de pie y no puedes apoyarte en ningún sitio. A ver cómo te sostienes cuando llegues al clímax...

Consiste en centrarse solo en las terminaciones de fuera: labios y clítoris. Así llegarás al orgasmo de manera lenta, sin prisa, pero lo más intensa posible.

El succionador de clítoris más famoso del mercado, con 11 niveles de intensidad para estimulación sin contacto, será tu mejor aliado en tus encuentros sexuales.

Se llama así porque el ritmo lo marca la persona que está arriba, ¡y hay que tener bien fondo! Apóyate en tu pareja si es necesario y controla a tu gusto el movimiento.

Si tu pareja y tú sois más o menos de la misma altura, haced esta de pie. Si no, tumbados es también genial. La idea es que expongas bien tu vagina y flexiones una pierna para que la penetración sea lo más profunda posible.

Desde atrás (ya sabes, ejem) que el momento penetración resulta más intenso. Así que, en esta postura, si notas que estás acercándote al orgasmo, enchufa tu vibrador y simplemente deja que todo fluya hasta la explosión. Yas.

Esta postura es genial para desinhibirte con tu pareja. La persona que recibe sentirá la penetración muy profunda y, mayor placer, si usa un vibrador.

Perfecta para ejecutar en la esquina de cualquier superficie elevada: la encimera de la cocina, la mesa del salón, en el lavabo...

Para ejecutar esta, se necesita un puff o una pelota de goma grande. La persona con pene estará arriba y esta, acompañará el ritmo con ayuda de la superficie mullida en la que esté.

Se llama así porque el final es muy dulce. Y la postura es la misma que la cucharita, pero añadiendo el factor más goloso: el 'traqueteo' de tu succionador.

Perfecta si el pene de tu pareja es grueso, porque lo sentirás de una manera más intensa. Tus manos quedarán libres, así que tú decides cómo quieres usarlas.

Si a tu pareja le mola tu trasero, esta postura será una fantasía para ella, y a ti te reportará también placer, porque llevarás el ritmo.

No es una postura de contacto, pero sí os servirá para conocer cómo os gusta exactamente.

Con esta, tú eres la que llevará el ritmo pero con un 'upgrade': la idea es que practiques lo que has aprendido con los 'Kegel' y sostengas el ritmo haciendo fuerza con tu vagina. Fantasía.

Perfecta si practicas yoga, pero también para sentir una penetración más profunda, pues él es el que llevará el ritmo sobre tu vagina, que estará muy expuesta.

En esta posición ambos podréis llevar el ritmo, así que puede resultar de lo más placentero para los dos.

La experiencia será doblemente satisfactoria y esta es la postura más cómoda para ti. Usad mucho lubricante, eso sí.

Una manera de disfrutar como siempre, pero dando la espalda y centrándote en las sensaciones.

Solo apta para quienes tengan equilibrio. ¿Os animáis?

Para conseguir esta, necesitarás equilibrio, así que apóyate en su rodilla y su pecho y lleva tú el ritmo.

Aprovechando que estáis bajo el agua, hazte con la alcachofa y déjate llevar con la presión del agua. (Esta postura es más fácil para las parejas entre las que no hay diferencia de estatura).

Pilla un cojín y flexiona tus piernas para que parezcan una isla montañosa. Desde atrás, sentirás la penetración más intensamente.

Esta es muy íntima y os resultará ideal para miraros y sentiros el uno al otro.

Por un precio superasequible, este masajeador inalámbrico de silicona portátil tiene 10 modos de vibración y es muy silencioso. (Funciona con pilas).

Si tu pareja puede sostenerte, sube sobre sus hombros y recibe sexo oral sujetándote a algún elemento resistente de la casa. Hacerlo así os resultará tan surrealista como placentero.

Esta postura es perfecta para dos mujeres. Coged un vibrador y colocadlo entre ambos clítoris para que haga todo el trabajo.

Solo para los más pros, si tenéis un columpio en casa esta es la posición más placentera para dar y recibir sexo oral.

En posición de pseudo69, esta servirá para dar placer a tu pareja desde un ángulo muy interesante, y que le provocará un placer único. Usad cojines para poder pillar el ángulo correcto.

Con las piernas flexionadas y en ángulo de 45º, deja que tu pareja succione tu clítoris hasta llevarte al orgasmo. Tu reto es mantener las piernas así, sin moverlas, ¿aguantarás?

Hazte con tu vibrador preferido y, encima de tu 'partner', explórate hasta llegar a la meseta. Mientras eso ocurre, haz un oral a tu pareja en la intensidad que te masturbas y, cuando estés a punto de llegar al orgasmo, aumenta la intensidad de tu trabajo oral. ¿Llegaréis a la vez?

Tu pareja encima y tú tumbada, con esta postura os resultará muy fácil alcanzar el clímax. Cada uno controla su placer, así que poned en común con señales cómo vais para poder llegar a la vez. Fantasía es poco.

Aquí la que está arriba es la que más equilibrio tiene que manejar. Eso sí, merecerá la pena porque el sexo oral recibe más atención, por lo que será más estimulante. La persona de abajo tiene las manos libres para jugar con ella misma también. Todo ventajas.

La persona en posición de perrito tendrá que mantener el equilibrio, pero será satisfactorio porque con esta postura, el orgasmo está garantizado: puedes hacer uso del juguete que más placer te da, mientras estimulas los genitales de tu pareja.

La diferencia con el anterior es que en este puedes variar la vibración por una superficie con la que rozar tu clit, una fantasía porque dominas las dos situaciones. La de dar y recibir. Ajá

Si se te da bien mantener el equilibrio, con esta podrás usar un juguete con el que penetrarte a ti misma mientras haces sexo oral a tu pareja, que estará de pie. Una coordinación de diez.

La diferencia con la postura del 69 que ya conoces es que los genitales de la persona de arriba están más expuestos gracias al ángulo de las piernas y la elevación del trasero. Una fantasía de posición y sensaciones.

Si eres de las que les gusta ver todo al revés, esta postura es para ti. Una manera de hacer sexo oral diferente y que supone mucho placer para el que recibe. Si es su noche por alguna razón, ¡celebradla así!

Esta postura es de lo más personal y generará un vínculo muy grande entre los dos. Colocad vuestras piernas entrelazadas y, sentados, comenzad besándoos y terminando con una penetración (sin dejar de miraros).

Con efecto bolas chinas, este vibrador puede usarse a distancia, un buen arranque para luego ejecutar cualquiera de las posturas.

Sí, es la postura de siempre, pero la diferencia es que para conseguir llegar al clímax, puedes estimular tu clítoris con tu mano y bien de lubricante. ¿Conseguirás mantener la coordinación? Todo el control recae en ti.

Para esta postura, el que recibe la vibración por parte de la pareja tiene que confiar en esta, y describir el paso a paso por el que va sintiendo más placer.

Como si fuera vuestra primera vez, colocaos el uno frente al otro acostados y comenzad a estimularos muy despacio, explorad cada rincón de vuestro cuerpo y terminad dejándoos llevar pero seguid esta clave: debéis estar dándoos abrazos continuamente.

Esta postura de pie es perfecta para parejas entre las que hay mucha diferencia de estatura. Se basa en la penetración, así que si tú eres la bajita, sube sobre tu pareja y llegad al éxtasis juntos.

La diferencia con el perrito de siempre es que tu pareja ha de estimularte el perineo con uno o dos dedos, una sensación que te resultará superplacentera (guíale para que lo haga correctamente) y llega al orgasmo sin pausa pero sin prisa.

Prepárate para ser estimulada de la manera más íntima por tu pareja. Acostada boca arriba, deja que te toque (bajo tus órdenes) y usa lubricante para que sea más divertido aún. Cuando estés a punto de llegar al orgasmo, intenta mantener la mirada.

En esta postura, la que recibe tiene que flexionar las piernas para que las sensaciones sean más intensas. Si es entre dos mujeres, podéis usar uno de los mejores juguetes sexuales o generar fricción uniendo vuestros clítoris. Fantasía orgásmica.

Con esta postura, la que recibe experimentará un placer que tendrá que controlar por estar de pie y la que da puede hacer uso de sus manos para sujetarse. ¿Lo mejor? La estimulación que recibirás que, siendo al revés, es mucho más... divertida.

La idea es que os hagáis con una vela cuya cera pueda usarse para masajes y experimentéis las terminaciones nerviosas de toda la piel, si sois capaces de llegar al orgasmo a través de otras estimulaciones, os pasáis el kamasutra.

Con un vibrador, pide a tu pareja que lo coloque de manera intermitente sobre tu clítoris, en una postura en la que tus piernas le rodeen y lo expongas sin vergüenza. Guía tú y disfruta.

Debajo de las sábanas, colocaos enfrentadas y masturbaos mirándoos todo el cuerpo. El calor que emanen vuestros cuerpos se quedará atrapado a vuestro alrededor, y el ambiente que se generará será de lo más íntimo.

Como si fuera un gato que ronronea por tu cuerpo, pide a tu pareja que te acaricie de abajo arriba y se pare en tus genitales para que te estimule hasta el clímax. ¡La vida 'pa' ti!

La idea es que, una encima de la otra, encajéis de manera que ambas sintáis placer, ya sea a través de los genitales o gracias a vuestras manos. ¿Aguantaréis el equilibrio?

En esta versión, solo vale mover las caderas, como si estuvieras haciendo 'twerking'. Como estás arriba, el ritmo lo pones tú, así que el placer está asegurado.

Para estimular el punto G, te encantará usar este formato en pareja. ¿Lo mejor? Viene con mando a distancia incorporado.

En esta versión no vale separarse ni un momento. Aprovechando que hace frío, esta postura será genial para entrar en calor. Probad un arnés y, si no tenéis, usad las manos para daros placer.

En esta postura tan íntima, pareceréis una flor de loto. Para daros placer, podéis usar vibradores o vuestras manos. El vínculo que se genera con esta postura aporta mucha confianza en la cama.

Si tenéis equilibrio, esta es la vuestra. La persona que esté erguida sostenerá a la que está inclinada. La idea es buscar la manera de que ambas partes sientan placer con un movimiento que vaya al compás. ¿Preparadas?

Con una postura en la que arquees la espalda, deja que tu chico lleve el ritmo desde atrás, ayudándose con una sábana con la que pueda embestirte mejor. Si es necesario, usa un vibrador para potenciar el placer.

¿Te animas a llegar al orgasmo a través de los pezones? Se puede. Usad lubricante de CBD para ayudar a la estimulación y pide a tu pareja que comience a lamerlos suavemente para aumentar el ritmo. Intercaladlo con el masajeo del clítoris y relájate para disfrutar y poder alcanzar el clímax.

Para pareja de chicas, coloca su pierna entre las tuyas y, con lubricante, roza tu clítoris con su muslo. Mientras te relajas y dejas que fluya, toca sus genitales para darle placer a ella también. ¿Quién llegará antes?

De 0 a 10, deja que tu pareja vaya eligiendo el nivel de vibración guiándose por tu cara de placer. ¿Aguantarás más de 10 minutos sin llegar al clímax? Se abren las apuestas.

Con un arnés si tienes pareja con vulva, deja que se ponga sobre ti exponiendo su clítoris, el cual puedes estimular con tu pelvis. Esta postura será más placentera para la que recibe.

Sin ser una postura de interacción física, sí os servirá para ver qué os gusta más y cómo os gusta. Cuando lleguéis al orgasmo, el segundo 'round' es haciendo lo mismo, pero el uno al otro.

Miraos como si os desearais comer y mastúrbale sin dejar de mirarle. No aguantaréis sin besaros ni daros más caricias, porque vuestras miradas fijas os invitarán a querer más del otro.

Muy placentera para quien recibe, esta postura es solo apta para acróbatas, pues tendrás que aguantar el equilibrio como una experta si el orgasmo llega hasta ti inesperadamente.

Esta postura es tan placentera como sentir la brisa del mar en tu piel. Deja que tu pareja maneje, bajo tus órdenes, tu juguete sexual preferido, y consigue que te lleve al orgasmo cuando menos te lo esperes.

Con las piernas juntas y siendo sujetadas por tu pareja masculina, dejando tu cuerpo en forma de L, deja que la fricción del pene sea lo primero que notes, y acompáñalo de tu vibrador favorito para potenciar las sensaciones.

Si tenéis bañera (o en la piscina cuando llegue el calorcito), probad a hacer el oral debajo del agua, intercalando el hecho de hacerlo fuera y dentro. Las sensaciones llevarán a la que recibe a tener un orgasmo épico.